Portugal vivió este fin de semana una boda real. La boda de una princesa portuguesa en un país que es república desde el año 1910. La familia aspirante al trono, los Braganza, llevan años residiendo con normalidad en el país vecino donde la monarquía no entra en los planes de promover un regreso, pero sí ha despertado simpatías la duquesa de Coimbra, María Francisca de Braganza, segunda hija del poseedor de los derechos dinásticos, Duarte Pío de Braganza.

El enlace celebrado este sábado en el palacio de Mafra recibió toda la atención mediática en Portugal y se contempló como un sentimental acontecimiento familiar que ha servido para que los más entusiastas defensores de la monarquía hagan alarde de sus deseos (y sin generar conflicto político interno).

Duarte Pío y su hija con las banderas monárquicas enarboladas por los vecinos de Mafra

Con la presencia de autoridades de la república portuguesa, en el exterior del palacio de Mafra, en cuya basílica se oficiaba la boda, ondeaban los colores del reino de Portugal. Las banderas azules y blancas, con el escudo nacional en el centro rematado por la corona, ondeaban en los mástiles y también fueron lanzadas al viento por espectadores que aplaudían la llegada de miembros de la familia real lusa y de otras casas reales que acudieron al acontecimiento nupcial. 

María Francisca de Braganza, de 26 años, se ha casado con Duarte de Sousa Araújo, abogado lisboeta de 30 años. El aspirante al trono y padre de la novia era quien llevaba del brazo a su hija en una ceremonia que fue seguida con ilusión por el público luso. A la boda se reunieron 1.200 invitados al palacio, contemplados por varios millones de espectadores a  través de la TV y las redes.

Los novios, María Francisca de Braganza y Duarte de Sousa Araújo,

Este enlace real se ha producido casi 30 años después de la boda de Duarte Pío con Isabel de Herédia, madre de la novia, ceremonia vivida en 1995.

A esta boda del sábado acudieron el presidente de la república portuguesa, Marcelo Rebelo de Sousa, el alcalde de Lisboa, Carlos Moedas,  o el que fuera  ex primer ministro portugués y dirigente europeo José Manuel Durão Barroso.

#NEW Infanta Maria Francisca of Braganza, Duchess of Coimbra and Duarte de Sousa have exchanged their wedding rings 💍🇵🇹 They look so so happy 🥹 pic.twitter.com/dQuj74kazf

— CoutureAndRoyals (@CoutureRoyals) October 7, 2023

Por parte de la familia real español no hubo presencia  al coincidir esta fiesta con la jura de bandera de la Princesa de Asturias en Zaragoza.  

María Francisca es tercera en la línea de sucesión en la familia real portuguesa. El primogénito es Alfonso y el matrimonio del duque de Braganza tiene un tercer hijo, Dionisio. Ambos estuvieron en primera fila en la boda de este sábado. En Portugal, aunque no reine la familia Braganza como en España rige la Ley Sálica por la que el varón prevalece en los derechos dinásticos sobre la mujeres aunque tenga menor edad, tal como contempla la Constitución.

La bandera monárquica de Portugal ondea al viento

En Mafra se ha vivido este fin de semana unos días de ebullición monárquica, con el impulso a sus símbolos. La bandera azul y blanca de Portugal fue relegada en 1911 por la actual con los colores republicanos, verde y rojo. Mientras que la monárquica son dos franjas verticales iguales que dividen el pabellón en dos, la bandera tiene en un tercio la franja vertical verde y dos tercios en rojo que alguna interpretación viene a descifrar una representación de la Península Ibérica. En la frontera de los dos colores el escudo portugués con una esfera armilar de la vocación ultramarina del país.