Los distintos fabricantes siguen trabajando en el desarrollo de sistemas que permitan recargar más cómoda y rápidamente la batería de los coches eléctricos. Trabajar con mayores potencias para alcanzar una mayor velocidad de carga cuando se usan infraestructuras de carga de corriente continua de uso público; la utilización de la inducción para, cuando se recurren a cargas con menor potencia, maximizar la comodidad del proceso; o el intercambio de baterías, una solución que permite reemplazar una batería ya descargada por otra totalmente cargada en unos pocos minutos y, así, poder conseguir la máxima autonomía rápidamente, están entre las alternativas más innovadoras.

Precisamente, Stellantis se apunta ahora a esta última solución al margen de que mantiene sus proyectos de carga inductiva en movimiento, y lo hace de la mano de Ample. Así pretende que, tras acceder a una estación de intercambio de baterías y tras sólo cinco minutos en ella, sus coches puedan tener una batería totalmente cargada, batería que sería una modular aportada por Ample. Las dos compañías también han iniciado conversiones para aplicar la tecnología de Ample para satisfacer la demanda de otras flotas y clientes.

El programa inicial está previsto que arranque en Madrid el año que viene, para lo que se empleará una flota de 100 Fiat 500e del servicio de carsharing Fee2Move. En estos coches se buscará un suministro de energía tan rápido y cómodo como el de repostaje de gas, por ejemplo.

Las baterías Ample están diseñadas para sustituir las originales y no requerirían modificaciones en las plataformas de estos. Por otro lado, las estaciones de intercambio se pueden instalar en sólo tres días, lo que permite disponer de una infraestructura ampliable para satisfacer la demanda. Además, son entre 3 y 10 veces más baratas que una estación de carga pública, según Ample.

Están dotadas de un sistema de reconocimiento que identifica a los vehículos habilitados para su uso en ellas cuando se aproximan. Una vez estacionados en su interior, se inicia el proceso con una aplicación móvil sin necesidad de más intervención del conductor. La energía para su carga provendría de fuentes renovables.

Este sistema de reemplazo de baterías se pondrá a disposición de los clientes mediante un sistema de suscripción, lo que reducirá el coste inicial del vehículo y permitirá que los usuarios puedan disponer de la última tecnología de las baterías, aumentando su autonomía y la vida útil del coche.