Semana de contrastes, de situaciones complicadas debido a la climatología, que nos ha hecho pasar un autentico calvario, subiendo la tensión a más de un cofrade.

Pero como siempre la esperanza de que llegará un nuevo amanecer en un Domingo de Ramos el día 13 de abril 2025. Para ello habrá que ir descontando días.

En estas reflexiones cofrades me gustaría plasmar algunos pensamientos de cara al presente y futuro de nuestras corporaciones, indicando que en las mismas nadie sobra todos somos necesarios, cada uno tenemos nuestro lugar, debemos de implicarnos más por esos titulares a los que les lloramos y rezamos. Debemos de apartar de las hermandades a aquellos que buscan sólo personalismos, aquellos que sólo les mueve el regenteo. Saben más que nadie sin escuchar al hermano que está a su lado. La formación es uno de los principales pilares en el que los cofrades tendremos que ir labrando cada día.

La presencia de la mujer ataviada con la mantilla española ha sido este año muy numerosa, asistiendo en algunas hermandades casi 100 mujeres, que luego el Viernes Santo con la Asociación de la Mantilla, visitaron los monumentos instalados.

Las hermandades deben de fomentar la salida de los hermanos con su hábito correspondiente en su hermandad, salvo aquellos que por alguna causa justificada o enfermedad no puedan salir a realizar estación de penitencia. No busquemos excusas y demos sentido a ser cofrades, asistiendo a los cultos que se celebran.

Si hemos mejorado en el aspecto patrimonial de enseres, bordados, exorno floral y musicalmente las formaciones que vienen nos deleitan con sus acompañamientos, debemos de abrir y fomentar la presencia de jóvenes costaleros, que no se tengan que salir casi todos los días bajo la trabajadera con el consiguiente problema para los últimos días de cortejos donde estos vienen muy castigados.

¡Feliz Domingo de Resurrección!

MÁS ARTÍCULOS DE OPINIÓN Ir a la sección Opinión »

Comentar

0 Comentarios

    Más comentarios