A las puertas de que le digamos adiós a 2023, las buenas noticias para una amplia mayoría de ciudadanos han sido la tónica habitual de la actualidad de estas últimas semanas. La subida de un 3,8% de las pensiones contributivas, de casi un 7% para las no contributivas y el Ingreso Mínimo Vital, representan la mejor cara de un país que no merece que se siga alimentando el enfrentamiento y el insulto.

En términos sociales y económicos, España es el espejo en el que se mira Europa gracias a otras medidas aprobadas recientemente y que permitirán distribuir 1.100 millones de euros a las comunidades autónomas para la atención a la dependencia. A ver qué excusa se saca ahora de la chistera Juanma Moreno para seguir manteniendo a las personas dependientes casi dos años en lista de espera.

En estos días, además, el Gobierno progresista ha aprobado dotar de más recursos a las comunidades autónomas y a los ayuntamientos para mejorar los servicios públicos y hacer frente a inversiones estratégicas. En concreto, las Entidades Locales recibirán 28.557 millones en 2024 del sistema de financiación. Esta cifra, un 22,6% más que en 2023, es la mayor de la historia y los ayuntamientos podrán destinarlo a políticas que mejoren el acceso a la vivienda, la movilidad sostenible, el cambio climático, la lucha contra la sequía o contra la despoblación.

El Ejecutivo de Pedro Sánchez ha desplegado en los últimos años una batería de medidas que han contribuido a que los ayuntamientos estén en una mejor situación financiera. Los procedimientos para la financiación de los pagos a proveedores o la posibilidad de reinversión del superávit han supuesto un enorme alivio para las arcas municipales.

De otro lado, las Comunidades Autónomas recibirán del Estado el próximo año más de 154,4 millones de euros. Con esta medida se alcanza una nueva cifra récord en materia de transferencias, en un momento en el que Andalucía está recibiendo 31.000 millones de euros más que con los gobiernos de Rajoy.

A pesar de que algunos solo se dediquen en nuestra provincia a dar voces en la televisión que pagan todos los almerienses y las almerienses, esta es la realidad de la España de hoy y de un presidente del Gobierno dedicado en cuerpo y alma a que nuestro país avance. Probablemente esto es lo que saca de quicio a una derecha que, carente de propuestas, solo se limita a gritar e insultar.