La ciudad de Almería es desde el viernes escenario principal de los actos nacionales de conmemoración del patrón del Cuerpo Nacional de Policía, los Santos Ángeles Custodios, lo que supone un orgullo para la ciudad y la oportunidad para todos los almerienses de demostrar el cariño hacia nuestras Fuerzas y Cuerpos de Seguridad, como en otras ocasiones lo hemos hecho con las Fuerzas Armadas.

Durante una semana, vamos a acoger diferentes actividades, desde conciertos a exposiciones, pasando por demostraciones prácticas, conferencias, pruebas deportivas y, por supuesto, el acto central, que tendrá lugar el jueves 27 de septiembre en el Parque de las Almadrabillas y que contará con la presencia del ministro del Interior, Fernando Grande-Marlaska. Mención especial merece la muestra 'La victoria de la libertad: La Policía Nacional contra el terrorismo' en el Museo de Almería sobre las víctimas de la Policía por acciones terroristas y también sobre operaciones antiterroristas. Un homenaje a las víctimas y a los 188 policías nacionales asesinados por el terrorismo.

Es el momento idóneo, como dice nuestro alcalde, Ramón Fernández-Pacheco, en un Bando dictado al efecto, no en vano fue el impulsor de que la ciudad albergara este Día, para que todos los almerienses demostremos los "estrechos vínculos de afecto a través de una participación activa en estos actos, engalanando ventanas y balcones con la Bandera de España, contribuyendo de este modo al homenaje que nuestra Policía Nacional rendirá al símbolo que a todos nos representa", invitación a la que me sumo como un vecino más para tomar parte en una celebración que, como continúa el Bando, "fortalecerá los vínculos de unión entre las Fuerzas y Cuerpos de Seguridad del Estado y la sociedad a la que pertenecen y sirven".

Como responsable de la Policía Local de Almería quiero felicitar al Cuerpo hermano y felicitarnos también por la coordinación, profesionalidad y buenas relaciones existentes entre ambas policías, lo que facilita mucho las cosas y multiplica la sensación de seguridad en la ciudad gracias a una labor muchas veces callada, pero sumamente efectiva.

Nuestra Policía ha evolucionado, como lo ha hecho la propia sociedad, y es hoy una de las más eficientes, eficaces y respetadas del mundo. Y gracias a su contribución vivimos en un país más libre y seguro, sabedores de que, aunque no se les vea, están siempre ahí, salvaguardando nuestros derechos y nuestra libertad.