Son varias las iniciativas que Almería capital tiene sobre la mesa para hacer una ciudad más sostenible, eficaz y de ágil acceso para residentes y visitantes. Una de estas propuestas viene en forma de ayudas europeas a través del Plan de Estrategia de Desarrollo Urbano Sostenible e Integrado (Edusi). Dicho de otra manera monetizada, 18.750.000 euros a gastar hasta 2022, resultado de la subvención de 15 millones concedida por la UE a la capital almeriense y la correspondiente aportación del Ayuntamiento que agrega 3.750.000 euros, completando así el 80% europeo. A través de este plan se aplicarán las tecnologías pueden llegar a hacer de las urbes un lugar más agradable donde vivir.

Son calles con interruptor o, lo que es lo mismo, capaces de regular, desde una central informática, la intensidad de luz de las farolas en función del número de transeúntes, y contenedores con sensores, por ejemplo, que permiten acomodar la ruta de los camiones de la basura a las necesidades reales bajo una mejor gestión. Pero el dossier recoge otras actuaciones dirigidas a darle inteligencia urbanística al salteado núcleo de Barrio Alto, renovar el anquilosado Zapillo o mejorar la imagen degradada del entorno de la Alcazaba. Hay prevista una reforma física urbana y obra pública al objeto de crear itinerarios peatonales, ordenar el aparcamiento, mejorar los espacios públicos, crear otros nuevos como una sala de lectura para jóvenes -es un barrio donde residen muchos universitarios- o la iluminación. Y actuaciones, mediante programas de subvenciones, dirigidos a incentivar la rehabilitación comercial con ayudas a la implantación de negocios y pensados también en los jóvenes emprendedores y se lanzará un programa de rehabilitación de edificios "ex proceso" para la zona.