El 30 de julio de 2023 es una fecha señalada para la estación intermodal de autobuses y trenes de Almería. Y un problema para las administraciones –Ayuntamiento, Junta de Andalucía y Gobierno–, ya que finaliza la concesión de su ocupación y explotación que le era entregada a Adif en el año 1998. El contrato no admite más prórrogas y las previsiones son que para esa fecha no estarán aún iniciadas las obras de la segunda fase del soterramiento y, por tanto, tampoco construida la estación provisional contemplada en este proyecto. El Ayuntamiento estudia la fórmula más adecuada en aras de garantizar la continuidad de los servicios de autobuses y trenes en esos meses de ‘vacío’.

La parcela sobre la que se edificó la intermodal es propiedad del Administrador de Infraestructuras Ferroviarias, que cedió a la capital por un periodo de 30 años. Construida la estación por el Consistorio, en 1998 Adif se hacía cargo de su explotación mediante una concesión de 20 años que vencía en julio de 2018. Durante un par de años, la gestión de la intermodal atravesó una situación irregular hasta que en 2020 el Ayuntamiento salvaba este escollo mediante una prórroga quinquenal, una posibilidad que contemplaba el contrato, y que finaliza el 30 de julio del próximo año.

La intención es licitar las obras de la segunda fase del soterramiento a finales del año en curso, principios del que viene. Este proceso administrativo puede alargarse unos siete meses por lo que ya se prevé que habrá un periodo de desierto, que el Ayuntamiento estudia solventar con un prórroga de carácter especial con la que queden garantizados los servicios de comunicación de autobuses y trenes hasta que den comienzo las obras del soterramiento. Para entonces, Adif trasladará a sus trabajadores a la antigua estación, mientras que seguramente los trenes a Almería finalicen su trayecto en Huércal.

En cuanto a los autobuses, el proyecto contempla la construcción de una estación provisional que acomodará las dársenas, ya que las obras afectan a la intermodal, que será reconvertida en una nueva estación con espacios diferenciados para autobuses y trenes con un vestíbulo común.