M I generación no veía mal el "bautizo con motes". Los usábamos con compañeros, amigos, profesores y, sin mala fe, pues un mote bien puesto, se reconocía casi como una obra de arte, tanto por el agraciado, como por los amigos comunes. Esa costumbre ha desaparecido, mayormente por el afán de "lo políticamente correcto", y esa es una de las razones, amén del ingenio necesario, por las que han desaparecido de la política. De hecho, si hay algo que no se le podía discutir a "Arfonzo" era su ingenio para ponerlos y los chascarrillos con los que remataba algunas discusiones. Por otra parte, Labordeta, que ha sido un personaje popular en toda España, ha quedado en nuestro recuerdo como "el de la mochila". Traigo todo esto a colación, porque he oído que la vice-presidenta Yolanda, ha dicho algo así como que "está dispuesta a recorrer España (¿con una mochila?) cuando pasen las elecciones de Andalucía, para explicar su proyecto…"

Como dijo Alfonso VI a don Rodrigo "el Cid Campeador" (apodo): "Cosas tenedes, Cid, que farán fablar las piedras."

MÁS ARTÍCULOS DE OPINIÓN Ir a la sección Opinión »

Comentar

0 Comentarios

    Más comentarios