El Club Deportivo El Ejido afronta esta semana su duelo más importante de las últimas tres temporadas, en el que prácticamente podría decidirse ya su futuro en la categoría de bronce del fútbol español. De ganar en Jumilla, los celestes mantendrían sus opciones de permanencia para las dos últimas jornadas, pero si los ejidenses pierden en tierras murcianas podrían quedar ya condenados a la Tercera División. Se puede decir, alto y claro, que el CD El Ejido se juega la vida este domingo, a partir de las 12:00 horas, en el Uva Monastrell.

A los del Poniente almeriense solamente les sirve ganar todo lo que les queda, empezando por imponerse a un conjunto jumillero que, para colmo, es un rival directísimo en la batalla por eludir el descenso. Esta situación hace que la salida de los celestes, a cuatro puntos de las posiciones de permanencia y a tres de la plaza de play out, se torne en una visita más que complicada y es por ello que la entidad que dirige el israelí Pierre Mevy quiere que sus jugadores no estén solos en el feudo del Jumilla. El club ha puesto a disposición de los fieles aficionados dos autobuses totalmente gratuitos, por lo que se espera que se produzca una marea celeste en tierras murcianas, como ya la hubo en la promoción de ascenso a Segunda B hace unos años en la eliminatoria ante el Lorca, en el Francisco Artés Carrasco.

Por el momento, según ha podido saber este diario, uno de los autobuses ya tiene todas las plazas reservadas y el segundo superaría ya la veintena. Todo hace indicar a que ambos se llenarán antes del jueves y que también serán muchos los seguidores celestes que viajen en sus coches particulares para animar a un CD El Ejido que necesita, ahora más que nunca, a sus aficionados. Se espera que cerca de dos centenares de fieles celestes, como mínimo, invadan las gradas jumilleras para llevar a los suyos en volandas hacia un triunfo obligado.