Fundada en 1904 por el industrial catalán Damián Mateu y el ingeniero suizo Marc Birkigt en Barcelona, la Hispano-Suiza Fábrica de Automóviles tuvo su máximo desarrollo en los años 20 y 30, y nunca dejó de pertenecer a la familia catalana Mateu. El primer Hispano Suiza, con 20 CV y 3770 cm3, iniciaría la larga serie de triunfos de la marca en competiciones deportivas. Un modelo similar le sería entregado a Alfonso XIII, iniciando una relación muy estrecha entre la marca y el rey español. Así, desde muy pronto estos automóviles fueron considerados de lujo y símbolos de prestigio social.

En 1910, una huelga de sus trabajadores casi da al traste con la empresa, por lo que se montó una sucursal en las cercanías de París que pronto superó la producción de la central de Barcelona. Durante la I Guerra Mundial fabricaría motores para la aviación aliada y el símbolo de Hispano Suiza, la cigüeña -en honor a una escuadrilla francesa que, equipada con sus motores, cosechó numerosas victorias durante la contienda-, apareció por primera vez sobre el capó del motor de un H6B en 1919. Este coche, el H6B, que montaba un motor de 6 cilindros y alcanzaba 150 km/h, fue concebido para competir con Rolls Royce y tuvo un enorme éxito entre las clases sociales con alto poder adquisitivo. Casi todas las casas reales de Europa contarían con uno en sus garajes. El modelo se fabricaría, bajo licencia, en Checoslovaquia, con la marca Skoda-Hispano Suiza.

Con la II República la imagen de la marca, tan unida a la realeza ahora exiliada, se vio perjudicada y su desarrollo mermó, aunque no por eso dejaron de fabricarse modelos nuevos. Tras el estallido de la Guerra Civil la fábrica de Barcelona, controlada por sus trabajadores, construyó blindados, mientras que la de París pasó a Sevilla para la reparación de aviones franquistas.

A partir de 1946 la Hispano Suiza, absorbida por el I.N.I., evolucionaría hasta convertirse en ENASA, fabricante de los camiones Pegaso.

Hoy el titán automovilístico resucita con el modelo denominado Carmen, en homenaje a Carmen Mateu, la matriarca fallecida el año pasado, mujer carismática y distinguida que presidió Hispano Suiza durante años y se involucró muchísimo en el desarrollo del nuevo modelo. Presentado en el Automobile de Barcelona en mayo, causó gran expectación por su diseño futurista y sus 1019 caballos. Hecho a mano, el 80 % de sus elementos es español.