República de las Letras

Se necesitan culpables

Que vaya pasando el verano. Ya veremos en septiembre, porque la vuelta al cole… ¡esa sí que va a ser gorda!

Se necesitan con urgencia culpables de la cantidad tan enorme de rebrotes de contagios por coronavirus que están surgiendo por casi toda España. Ya no podemos culpar de todo al Gobierno, ni negar la pandemia echando mano de cualquiera de las teorías conspiranoicas que los neofachas estuvieron difundiendo durante el confinamiento. Resulta que si no estamos ya ante una segunda oleada de covid-19, poco nos falta. Y de eso la culpa la tiene alguien. Ahora que toda la responsabilidad de la Sanidad Pública en cuanto a la pandemia se refiere está en manos de la Junta de Andalucía, y teniendo en cuenta que está gobernada por la derecha, no es cuestión de andar publicando en la prensa opiniones críticas sobre la gestión que está haciendo la Junta de la crisis sanitaria. La verdad es que era más fácil cuando todo consistía en criticar al gobierno socialcomunista-bolivariano y en concreto a Pedro Sánchez y al coletas (sobre todo al coletas). ¿Qué hacemos entonces? ¿Admitir que lo que se hizo de marzo a junio fue lo que se tenía que hacer? No. Mejor buscar un culpable. O varios, una vez puestos. Podemos, por ejemplo, echarle la culpa al botellón. Al fin y al cabo en los botellones se reúnen los jóvenes y ellos no mantienen distancias, ni usan mascarillas ni gel desinfectante. Igual que en los bares, piscinas, playas, conciertos y, en fin, cualquier actividad que precise multitud, pero al botellón sí lo podemos declarar ilegal, aunque lo sea ya desde hace tiempo, e incluso enviar un par de policías locales para que se vean por televisión, así justificamos que estamos vigilantes. Podemos culpar a los temporeros. O no, pero si los sacamos en los telediarios justo detrás de las noticias sobre los rebrotes de covid-19, pues… Para nada vamos a mejorar sus condiciones miserables de vida, ni siquiera por nuestro interés sanitario, pues cuesta dinero. Además, está lo del efecto llamada, que siempre es un recurso. Podemos, si no, echar la culpa a los inmigrantes ilegales, esos que vienen en patera. Esto es muy socorrido. Electoralmente, siempre da juego. ¿Que los controlamos en cuanto desembarcan? Hombre, claro. Somos eficientes, estamos vigilantes. El caso es que alguien cargue con el mochuelo de los muchos rebrotes que han surgido como setas. Y así, con la gente distraída, que vaya pasando el verano. Ya veremos en septiembre, porque la vuelta al cole…¡esa sí que va a ser gorda!

MÁS ARTÍCULOS DE OPINIÓN Ir a la sección Opinión »

Comentar

0 Comentarios

    Más comentarios