La tapia con sifón

Embutidos marinos

Hay que felicitar a los noruegos por el éxito de la publicidad que han hecho de su salmón

La consulta de un lector me da a conocer un producto del que no tenía ni idea: salchichas de hueva de merluza cocida. Al principio pensé que podría ser parecido a los embutidos de pescado que inventó Ángel León hace años, pero no tienen nada que ver. Se trata de hueva de merluza cocida y embutida de forma similar a las salchichas blancas alemanas. El susodicho comunicante pregunta, entre otras cuestiones, si son saludables. La composición es simple: hueva cocida y sal; por lo tanto son mucho más recomendables que las habituales salchichas "frankfurt" y similares, cargadas de aditivos, grasas saturadas, harinas y otras lindezas. También los embutidos propiamente dichos (chorizos, morcillas, salchichones…) están bien surtidos de grasas saturadas y colesterol; amén de bastantes aditivos, salvo que sean caseros, cosa muy poco habitual hoy día.

Y ya que ha salido el colesterol, hay que decir que las huevas son uno de los alimentos más ricos en tal sustancia: 500 mg/100 g en las huevas frescas; en las cocidas no creo que varíe mucho, aunque no lo indican los fabricantes de estas salchichas; dicen que tienen (por cada 100 g) 179 kcal, 10,1 g de grasas (saturadas, 2,3), 1,9 g de azúcares, 20 g de proteínas, 0,83 g de sal y 1.600 mg de Omega 3. Del colesterol no dicen ni pío. Salvo ese detalle, están muy bien, aunque son mejores los embutidos de Ángel León, que están hechos con pescados azules y tienen todas las ventajas de la salchicha de hueva, pero sin el colesterol, y además tienen cantidades relevantes de vitaminas A, D y, muy importante para los que no comen carne, B12. Y ya que hablamos de pescados azules, hay que felicitar a los noruegos por el éxito de la publicidad que han hecho de su salmón que, a pesar de ser de piscifactoría, ha conseguido que todo el mundo lo coma como si fuera el no va más de la gastronomía y la salud; está hasta en la sopa, incluidas recetas de altos cocineros, revisteros, críticos y nutricionistas. ¡Por favor! Nuestra humilde sardina tiene entre 3 y 5 veces más calcio, hierro, vitamina A y B12 que el salmón. Y es mucho más sabrosa, la podemos comer recién pescada y es más barata. Hasta el gorro estoy del salmón de piscifactoría. Y en cuanto a las huevas, ya puestos a desafiar al colesterol, prefiero unas lonchitas de hueva seca de mújol, que son las más finas y sabrosas de las salazones. Y piden vino.

MÁS ARTÍCULOS DE OPINIÓN Ir a la sección Opinión »

Comentar

0 Comentarios

    Más comentarios