Narcopolítica

La narcopolítica debería ser una de las cuestiones geopolíticas a tener en cuenta como amenaza futura

Hay un término que me llama mucho la atención y es el de la Narcopolítica. Según la RAE se da cuando las instituciones del estado están limitadas por el Narcotráfico. No obstante al otro lado del charco hace referencia al hecho de que en la clase política ha irrumpido una subclase compuesta por narcotraficantes. Su intromisión ha llegado a ser tan grande en algunos países que para ser político debe existir una conexión previa con el mundo de los narcos. Pero esto no solo es un rasgo suramericano sino que se da también en algunos países africanos y de oriente. Esto deriva en otros neologismos como narcoestado o narcoeconomia, y describen contextos donde el tráfico de la droga marca grandemente la deriva de un país. Analizando en profundidad esta situación nos encontramos con estructuras de poder superpuestas en un mismo tapiz. Los poderes se fusionan para crecer tal como hicieron, en otra época, las casas dinásticas de la vieja Europa. Pero hay más ejemplos en occidente: la mafia sin ir más lejos. Esta es otra estructura de poder que ha tendido a fusionarse con la casta en algunos casos y en otros a establecer un acuerdo por los dominios. Otro ejemplo viene de la mano del profesor Díaz Salazar, de la complutense, al realizar un estudio sobre Max Weber y el cristianismo. En esta investigación arguyó que en el mundo laico se ha tejido una relación entre la política y el cristianismo, donde la una utiliza los modus operandi de la otra. Al hilo de todo lo expuesto, no nos queda más remedio que aceptar este proceso histórico también en el presente. Y precisamente por ello, por su existencia, tener miedo. La política europea puede verse afectada por la narcopolítica. Todos hemos aceptado alguna vez el poder de los grupos económicos transnacionales en el capitalismo global. Por ello no puede descartarse el narco como uno de esos grupos. Dada la tendencia a la superposición de estructuras y a la fusión de las mismas es imposible negar la posibilidad de este hecho si el futuro que nos depara la pandemia mundial debilita en exceso a nuestros países, a nivel político y económico. Supone, creo yo, una amenaza emergente a tener en cuenta, que se merece un protocolo de contención. Sería muy triste pensar en un mundo posterior a este donde esa estructura marcara nuestros días. Por ello estas cuestiones geopolíticas deberían estar entre nuestros miedos.

MÁS ARTÍCULOS DE OPINIÓN Ir a la sección Opinión »

Comentar

0 Comentarios

    Más comentarios